Cuando aún no se ha decidido cuál será el nuevo emplazamiento de la nueva estación depuradora del Besaya, y se continúan analizando las alegaciones presentadas a cada una de las siete ubicaciones propuestas, el Ministerio de Medio Ambiente ha iniciado hoy los trámites para licitar el proyecto de demolición de Vuelta Ostrera, que tiene un presupuesto de 358.370 euros e incluirá todas las actuaciones necesarias para demoler esta depuradora y acondicionar y restaurar los terrenos afectados hasta que recuperen el estado original en el que se encontraban antes de la ejecución de esta infraestructura.
El Ministerio, que ha publicado el inicio de los trámites para derribar Vuelta Ostrera en el Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE), sigue así avanzando en el cumplimiento de la sentencia firme dictada por el Tribunal Supremo en el año 2005, que ordenaba su demolición una vez que la nueva depuradora, que sustituirá a la anterior, entre en funcionamiento.
"Empezar la casa por el tejado"
Sin embargo, el inicio de este trámite ha sido rechazado hoy "frontalmente" por el El Gobierno de Cantabria, que considera que esta gestión debe ser la última, después de construir la nueva depuradora; de no hacerlo así sería "empezar la casa por el tejado", ha criticado hoy la vicepresidenta regional y consejera de Medio Ambiente, Eva Díaz Tezanos.
La vicepresidenta recuerda que el compromiso de la ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel Tejerina, “era demoler la EDAR después de construir una nueva”, por lo que considera “incomprensible” que el Ministerio haya tomado la decisión de iniciar los trámites tendentes a la demolición de Vuelta Ostrera. Díaz Tezanos considera “lo más lógico y razonable” determinar primero el lugar en el que se ubicará la alternativa a la depuradora de Vuelta Ostrera, después encargar el proyecto, ejecutar la obra y finalmente redactar el proyecto de ejecución del derribo, pero siempre que antes “haya entrado en funcionamiento la nueva depuradora”.
En este sentido, recuerda que, en estos momentos, tras finalizar la exposición pública, se está tramitando un expediente para determinar “el mejor” emplazamiento desde el punto de vista medioambiental para la nueva EDAR. Y advierte del daño “incalculable” que se puede producir en las aguas de la Ría de San Martín y de las playas de Suances y de Miengo, si finalmente se derriba la actual depuradora sin haber construido antes una alternativa. “No es razonable que se empiece al revés porque será una catástrofe ambiental y económica”, ha recalcado la vicepresidenta.
