La sección sindical de USO en Solvay ha denunciado la última medida de recorte laboral adoptada en esta empresa. En concreto, en el departamento de mantenimeinto electromecánico, servicio subcontratado hasta el pasado 31 de diciembre a la empresa Mego. Desde este 2 de enero, dicho servicio ha sido adjudicado a Telnor, expulsándose a los 16 trabajadores que llevaban más de 25 años trabajando para Solvay.
El portavoz de USO en la planta de Barreda, José Vía, afirma que a dichos trabajadores se les ha propuesto renunciar a todos sus derechos laborales como condición para reincoporarse a sus puestos en la nueva contrata. Un "chantaje en toda regla", según Vía, que "sienta un peligroso precedente de cara a la futura renovación de otras contratas", ha advertido.
USO considera repudiable los efectos de esta práctica impuesta por Solvay, que supone una"escalada en la precarización camino de la explotación de los trabajadores; sometiéndoles al chantaje de tener que renunciar a sus derechos para seguir haciendo el mismo trabajo".
